Contexto de la Parábola
Jesús salio de la casa en donde se encontraba y se sentó junto al lago. Pronto se reunió una gran cantidad de personas alrededor de él para escuchar sus enseñanzas. Jesús subio a una barca que estaba en la orilla y comenzó a predicar su enseñanza sobre » La Parábola del Sembrador».
¿Qué dice la Parabola del Sembrador?
Otras semillas cayeron entre espinos, los cuales crecieron y ahogaron los brotes, pero otras semillas cayeron en tierra fertil, !Y produjeron una cosecha que fue treinta, sesenta y hasta cien veces más numerosa de lo que se había sembrado! El que tenga oídos para oir, que escuche y entienda"
Explicación de la Parábola del Sembrador
Las semillas que cayeron en el camino representa a los que oyen el mensaje del reino y no lo entienden. Entonces viene el maligno(diablo) y arrebata la semilla (palabra de Dios) que fue sembrada en el corazón.
Las semillas sobre la tierra rocosa, representan a los que oyen el mensaje y de inmediato lo reciben con alegría, pero como no tiene raíces profundas, no duran mucho. En cuanto tiene problemas o son perseguidos por creer la palabra de Dios, caen.
Las semillas que cayeron entre los espinos representa a los que oyen la palabra de Dios, pero muy pronto el mensaje queda desplazado por las preocupaciones de esta vida y el atractiva de la riqueza, así que no se produce ningún fruto.
Las semillas que cayeron en la buena tierra representan a los que de verdad oyen y entienden la palabra de Dios, !y producen una cosecha treinta, sesenta y hasta cien veces más numerosa de lo que se ha sembrado.
Análisis de la Parábola del Sembrador
Jesús aplica el efecto de predictar la palabra (semilla) en diferentes tipos de personas que están en distintas situaciones espirutales (tipos de tierra).
Semillas que cayeron sobre el Camino
La palabra predicada en las personas que clasifican en el «Camino», son las más desamparadas espiritualmente, porque no tiene un red de apoyo ni comunidad que pueda explicarles la palabra para puedan entenderla y así poder atesorarla en el corazón, o bien ellos están sumergidos en sentimientos que la rachazan, como puede ser el odio, el orgullo o la duda, de los cuales el Diablo se alimenta y hace que la palabra sea arrebatada de ellos y no puedan recibirla.
Semillas que cayeron sobre la tierra rocosa
La palabra aplicada en las personas que se clasifican como «Tierra Rocosa» se encuentra en una situación en que tienen un corazón dispuesto a recibir la palabra, y ante los problemas no acuden a Dios y con el tiempo dejan de creer en su palabra. Terminan cayendo en el pecado y ningun fruto espiritual puede salir de ellos.
Semilla sobre Espinos
En este caso, son las personas que se encuentran ante complicaciones, preocupaciones y ambiciones de la vida mundana, como puede ser el dinero, compra de articulos, empresas y negocios. En este tipo de personas la palabra de Dios es muy dificil que llegue, porque ellos deberían despojarse de esa necesidad materialista / consumista y centrarse en lo que la palabra de Dios nos enseña, que es conseguir los tesoros espirituales. Finalmente Dios no puede entrar en sus corazones porque ellos estan presos en las cosas del mundo terrenal.
Semillas que Cayeron en Buena Tierra
Por último, nos encontramos a las personas que aceptaron el mensaje de Dios en sus corazones, se mantivieron firmes antes las dificultadas, comprendieron la palabra, renunciaron a los pecados que habian cometido o que por desconocimiento se encontraban victima de ellos. Comprendieron que su vida espiritual es más importante que la terrenal y pudieron dejar a Dios como una de sus prioridades.
Aplicación
Las enseñanzas, mensajes y amor que nos entrega la palabra de Dios por medio de la Biblia, requiere de un corazón dispuesto a escuchar, ser humilde para entender que se encuentran en un error, ser critico del pecado, renunciar a el y cambiar de dirección a lo que Jesús nos predica.
Siempre debemos obrar con el ejemplo con lo dice Santiago no basta con escuchar la palabra sino la obecedes.
En definitiva, lo que deberiamos hacer como cristianos es creen en Jesús, entender que su vida, sus acciones, su pureza al nunca haber cometido pecado alguno, fue el sacrificio o ofrenda que se terminó entregando por sanarnos y librarnos de nuestros pecados si nos arrepentimos y no volvemos a caer en ellos.
La conexión de Juan el Bautista con el Señor era tan perfecta, que él reconocer al mesías una vez fue bautizado con agua, el espiritu santo descendió en el Jesús, y apartir de eso momento supo que él salvaría al mundo del pecado y creyo en él.
Del mismo modo debemos creer y tener fé por sobre toda dificultad, llevar el evangelio a los que lo desconocen y esforzarnos para que la semilla de la palabra de Dios pueda llegar a tierra buena y esta se masifique al treinta, sensenta y cien por uno.